domingo, 28 de enero de 2007

Royal de Luxe en Santiago; diagnóstico al verano capitalino















Aclaremos: el verano en Santiago es lo más cercano a, digamos, inyectarse aire en una vena. Y segundo: sé que esto sería una columna de música, pero uno es humano, y no hay nada más humano que la disgresión.
La compañía Royal de Luxe viene de tanto en tanto a la capital de Chile, alguna razón puede ser la extraordinaria convocatoria que tiene siempre.
En fin, lo que ha acontecido estos días en santiago es lo más cercano a juntar un poco de todo de lo que puede denominarse una espectáculo a gran escala: histeria colectiva, desórden público, robos, niños perdidos, comercio ambulante, y para qué seguir. Pero lo medular, e intrigante, es que esta compañía ha sabido generar hordas (multitudinarias hordas) de gente que desea verlos, ocupando un artificio tan antiguo como la narración oral: las marionetas, artefactos dotados de "falacia patética", convertidos en seres dotados de vida. ¿Qué es lo mágico?, simplemente, todo: uno llega a olvidar que hay gente detrás de estas cuerdas, embelesado, obnuvilado por la magnífica manera de mimetizarse de estas marionetas con nosotros. Espejos pequeños o grandes (como en este caso) de nosotros, todos jugando a vernos en el ideal de una historia mágica, de un cuento que, de tan fantástico, se vuelve lo que se repite siempre de una buena narración, la hija mimada del mito. La gota de imaginación que permite seguir soportando su enfrentamiento con la convención.
Y claro que es una locura ver tanta fascinación mezclada de forma cruda con llantos de niños buscando, personas con ataques de pánico y agorafobia, discusiones por el espacio, por el calor, por la imposibilidad de llegar a un buen sitio de observación. Pero también nos lleva a la idea de que la gente aún quiere entretenerse, aún quiere maravillarse, aún le ocurre algo con cierta magia perdida entre bites y cuentas corrientes. Algo así como un atardecer con marionetas gigantes con un telón de fondo que espera no volver a ser bombardeado.

4 comentarios:

Carlos dijo...

http://hangoverhard.blogspot.com, algo de punk y pshycobilly del mundo.

Fix dijo...

Debo confesar de que las noticias vistas en tv acerca de la pequeña gigante me tenian harto. Eso quizás porque lo veo a la distancia, estoy muy al sur. Es posible que haya sido para la gente un autentico goce. Aunque sigo odiando a los bobos periodistas y su contenta aura basada en el efecto de la pequeña.

Saludos.

Daneil dijo...

Por supuesto fix. El comentario se basa, justamente, en eso; en el hastío que provoca una situación que, por ocurrir en estas fechas donde "no ocurre nada", se le de bombo y caja a una situación que es sobrevalorada. NO digo que el elemento artístico sea malo, sino lo que pudre una situación periodística-sociológica como ésta. Sabes algo de una "pequeña gigante" que hicieron de plumavit?? sé que ocurrió en un lugar de chile, no recuerdo cuál.
Saludos y suerte

Daneil dijo...

Gracias don Carlos, y cómo siempre aún le debo la música, ¿ha escuchado Neon Boys"? Banda anterior a Television, dele una vuelta.